Lunática Pensante.
¿De que sirve una descripción si como quiera las personas piensan lo que le venga en gana?
hola

"Todas las pasiones son buenas cuando uno es dueño de ellas, y todas son malas cuando nos esclavizan."
sábado, 11 de enero de 2020
El niño que yo quiero
jueves, 18 de octubre de 2018
Alzo la copa y brindo hacia el cielo
martes, 26 de diciembre de 2017
Una herida más.
lunes, 7 de agosto de 2017
TÚ, sinónimo de problemas.
Nuestra relación desde un comienzo fue complicada. No era la típica relación de adolescentes donde por lo menos el inicio es todo amor y todo dulzura. ¡NO!
Desde la primera semana de iniciar nuestra relación ya teníamos problemas. Discutíamos por terceros y hasta sin necesidad. ¿Por que si desde la primera semana estábamos peleando no paramos y nos fuimos por caminos diferentes? Quien sabe. Pero en vez de eso nos quedamos y decidimos probar a ver que tanto podía resultar lo nuestro.
No puedo decir que fue un grave error porque QUE CLASE RELACIÓN TUVIMOS.
Quisiera conocer a una pareja que haya atravesado tantas dificultades como lo hicimos nosotros. Tantas peleas, cuantas lagrimas derramadas, cuantas palabras hirientes, todos esos "No te quiero volver a ver en mi vida" o "Suéltame en banda" que al parecer era tu palabra favorita cuando estábamos discutiendo.
No podría sacar la cuenta de cuantas veces nos separamos y de cuantas veces te rogue para que volviéramos. Yo era una masoquista porque prefería pasármela peleando contigo que estar del todo sin ti. Era enfermo, porque yo lloraba sin parar cuando algo no estaba saliendo bien, me dedicaba a complacer cada una de tus cosas y fingía que algo me gustaba cuando era todo lo contrario. Me volví dependiente, reía si tu lo hacías, salia solo contigo y hasta me aleje de todos mis amigos solo por complacerte.
Cabe destacar que aquí estoy escribiendo desde mi punto de vista, no estoy diciendo que tampoco seas la persona mas cruel ni nada por el estilo porque entiendo que tenerme a mi no es tarea fácil porque yo un 2+2 lo complico y te felicito por aguantarme, si, aguantarme porque aunque no crean me considero un peso pesado en cuanto a todo.
Duramos contra todo pronostico tres años (03 Años) Si, tres años juntos. Se que muchas personas se sorprendían y no entendían como dos titanes podían estar juntos si hasta el perro se daba cuenta de todas las dificultades que teníamos.
Finalmente luego de tanto decaímos y entendimos que las peleas, los llantos, las malas noches, el "te perdono" "¿me perdonas?", las palabras hirientes, el salir corriendo para que me perdones, el escribir "listines" como tu decías, el hacerte regalos y compensarte y viceversa ya nada de eso valía la pena, ya no valía la vida, no valía nada porque siempre terminaríamos en lo mismo, terminaríamos en ese circulo vicioso que ambos formamos al inicio y no supimos detener a tiempo.
No escribiré de forma despectiva hacia ti ni mucho menos porque de los miles de problemas que pasamos durante nuestra relación mas de la mitad era por mi.
Muchas personas me decían que tu no eras la persona indicada para mi, que me hacías daño y aun yo seguía, que yo era demasiado para ti, que yo me podía conseguir a alguien mejor, que yo era demasiado inteligente para quedarme contigo, que no te hiciera nada porque tu no lo merecías, en fin, muchísimas cosas. Pero nadie, nadie sabia como era yo estando a solas contigo, nadie conocía la faceta tuya donde todo lo que me decías me hacia sentir plena, nadie supo lo delicado y sutil que fuiste a solas conmigo en nuestros momentos buenos y nadie nunca sabra lo feliz y completa que era a tu lado, porque las personas solo veía lo de encima, nunca se detuvieron en ver si de verdad nos amábamos. Y lo hacíamos, todavía lo hacemos pero crecimos y nos dimos cuenta que juntos por momentos estábamos bien pero que por separados íbamos a ser felices como ambos anhelábamos.
Tu te encargaste de ser lo mejor que me ha pasado y al mismo tiempo te convertiste en todos mis problemas. No comprendo como una persona puede lograr ambas cosas al mismo tiempo.
Nos dijimos que íbamos a ser amigos pero ¿Como podíamos ser amigos si aun nos amábamos? y aunque ambos estábamos siguiendo con nuestras vidas seguíamos en el jodio circulo y definitivamente nos seguíamos haciendo daño.
Siempre seras mi persona favorita, me diste todo cuando no tenia nada, me abrazaste cuando sentía frio y me diste un amor que considere bueno mientras lo necesitaba, me cuidaste y hasta cuando lloraba por ti tu mismo limpiabas mis lagrimas. Fuiste excelente por no decir el mejor... Pero no era nuestro tiempo, no era el momento y sufrimos la consecuencia de un amor inmaduro. De igual forma siempre te amare con todo mi ser, siempre me pondrás nerviosa, siempre estaré a tu disposición y cuando metas la pata como por lo general haces te estaré esperando para agarrarte de las orejas.
Te lo dije una vez y vuelvo y te lo escribo... En mi otra vida me case contigo, tuvimos dos hermosos niños; Jayden y Jeyleen y estábamos bien, todo estaba bien.
Y sabes que NUNCA, NUNCA dejaría pasar tu cumpleaños...
Feliz cumpleaños corazonmio, que Papito Dios te siga bendiciendo enormemente, te continue ayudando a lograr cada una de las metas que tienes propuestas, siga iluminando tu camino, te guie y te proteja siempre.
Esperando que te sigan haciendo feliz, te sigan cuidando y que hagan que enseñes esos dientes tan bonitos que tienes. Deseo todo lo mejor para ti hoy y siempre.
Y aquí termino mi escrito, esperando que no te haya ofendido en absolutamente nada y aunque no dije ni la segunda parte de todo lo que quería decirte lo dejare hasta aquí y seguiré con mi cabeza en alto dejando por lado esa ultima conversación que tuvimos donde me terminaste partiendo como siempre.
Hasta que el destino quiera volver a juntarnos JD.
viernes, 7 de abril de 2017
Creo que...
Casi todas las noches durante mas de un año me prometía en voz baja que no me volvería a pasar lo mismo, que no permitiría que nadie interfiriera en mis objetivos, que las cosas se harían a mi modo y que una persona no se merecía sufrir por mas de 8 meses.
Nunca dije lo agonizante que fueron todos esos meses, siempre decía que me encontraba bien, que yo no me quedaba en el pasado y que ya estaba superado. Mas que hacérselo creer a las personas me lo quería hacer creer a mi.
Hice lo peor... Me quedé con todo lo que sentía por dentro, no lloraba, no hablaba de lo que me estaba pasando ni siquiera escribía todo lo que realmente sentía. Aparenté mas de lo que era y vivía con una sonrisa digna de una reina de belleza. No sabría explicar el porqué me mantenía fingiendo que nada me dolía. Pensé que había algo extraño en mi, porque ni siquiera rogé como siempre hacia sino que simplemente fui hacia mi habitación a volverme pequeñita como cuando algo no me salia bien, como siempre...
Todas las noches era lo mismo, prometerme que no podía permitir que nadie me dañara, que nadie se burlara de mi, mostrarme firme y seguir caminando.
Las primeras noches fueron las peores porque me encantaba jugar con mi herida y no permitir que cicatrizara, el dolor me mantenía alerta, me mantenía viva, así que todas las noches me dedicaba a ver mensajes, fotos, cartas, escuchar notas de voz y hasta contar todas las llamadas que habían. Era enfermo, mi dolor era enfermo.
Luego de algunos meses comencé permitirme dormir. Primero me despertaba unas cuantas veces en las madrugadas para recordarme que estaba sola y que siempre lo estaría. Pensé en tomar pastillas pero para eso tenía que ir a un médico y realmente no quería perder tiempo, quería dormir mis noches completas sin recordarme lo patética que era. Le pedí a Dios que por favor me ayudara a olvidar ya que nunca lo tendría a mi lado de nuevo. Una noche sin pleno aviso pude dormir hasta mi hora de despertar. Creo que me sentía nueva y miré mi herida y estaba cicatrizando de una manera bien bonita, hasta que llegué a pensar que ni marca quedaría. Unas cuantos meses mas y ya solo quedaba una pequeña seña de que algo pasó pero que no me mató.
Entonces si pasó lo peor... Lo vi, lo vi de nuevo y su confesión hizo que mi herida que ya estaba sana se abriera y se convirtiera en una gran grieta que ni con todos los años del mundo podría taparse.
Tenía que liberar lo que sentía, tenía que gritar de ser necesario y lloré, lloré como nunca, lloré porque me sentía perdida, porque lo odiaba, odiaba a todos, me odiaba. Todo estaba mal, nada iba a mejorar. Yo quedaría estacanda y mi herida acabaría con lo poco que quedaba de mi. Había sanado, con muchísimo esfuerzo y con un rato destruyó todo lo que había construido.
No se por cuantas horas lloré porque me quedé dormida y desperté con mis ojos como cuando te dan dos trompones. Morado, pequeños e hinchados. Mis labios estaban alterado y no tenia voz pero para mi sorpresa a pesar de que tenia un físico del asco mi humor estaba bien, me sentía liberada, me sentía en paz y aunque mi cicatriz estaba a la vista, abierta totalmente decidí no ponerle la mano y dejar que sanara sola sin tener que fingir. Y sanó.
Confieso que creo que tengo miedo de que la pequeña marca se abra y que yo no pueda curarla...
viernes, 24 de marzo de 2017
... Parte II
Vi como se repasaba los labios con esa lengua que estuvo en mi zona íntima hace unos momentos. Me extendió su mano para que me acercara hacia él, eso hice.
Tenia la camisa abierta y en su pantalón se marcaba la gran erección que tenia. Lo besé, lo hice delicadamente y mis dedos recorrieron su hermoso pelo, él me agarraba con fuerza y con una enorme necesidad. Lentamente terminé de quitar su camisa y dejé que cayera al piso, lo miré a los ojos, los tenia oscuros por el deseo que tenía, miré hacia su erección y la toqué, éste murmuró algo que no entendí bien. Me apoyé en mis piernas y me dispuse a quitar su pantalón, mientras lo bajaba se asomaba unos bóxer completamente blanco y totalmente pegado a él. ¿Habia mencionado que era un espectáculo de hombre? Definitivamente lo era. Por encima de su ropa interior comencé a tocarlo mientras lo hacia lo veía a la cara, tenía los ojos cerrados así que aproveché y de forma rápida deslicé sus boxers por sus pies para ver como salia su pene. Estaba muy nerviosa pero aun así me armé de valor y lo agarré firme con mi mano izquierda y lo introduje en mi boca, lentamente me iba llenando de él, lo introduje mas y mas hasta que casi llegó a mi coronilla, lo solté un poco y comencé a masajearlo con mi lengua, pasándola varias veces por su frenillo.
Me retiré totalmente de él y lo invité a que se acostara en la cama. Lo hizo rápido. Ahí estaba él esperando por mi y le cumplí, me trepé encima y comencé a dejar un recorrido de besos por su pecho, por su camino feliz, hasta que llegué donde comienza su vello púbico, pasé mi boca por esa zona, luego mi lengua, todo eso mientras mis manos recorría sus muslos y sus testículos, volví a introducirme su pene en la boca y empecé a chupar, él agarró mi cabeza para introducirlo más adentro, eso hice, lo llevé lo mas lejos que podía y el gruñía de satisfacción, agarraba mi cabeza y tanto él como yo comenzamos a implementar un ritmo de dentro fuera, mientras entraba y salía no dejaba de pasarle la lengua por su glande. Sin darme cuenta estaba debajo de él y su pene estaba entre mis pechos, a espera de que lo masturbara con ellos. Uní mis pechos entre su pene y comenzamos a movernos, arriba, abajo, arriba, abajo y mi lengua fuera para que cuando subiera se topara con ella.
Su respiración estaba forzosa pero no dejaba de mirarme con sus ojos bien oscuros, eso me prendía mas. Mientras seguíamos con ese jueguito su mano se deslizó por mi pierna se pasó por mi vagina y entró unos de sus dedos rápidamente por mi hendidura sin darme tiempo de asimilar. Grité, grité de placer. Quería tenerlo en mi boca de nuevo así que le pedí que cambiáramos, eso hizo. Me puse sobre mis pies nuevamente mientras él introducía su pene en mi boca, pero ahora era con exigencia. Quería que se viniese así como lo hice yo y comencé a chupar realmente a chupar, lo estaba haciendo rápido y con mis manos apretaba sus nalgas. Él tenia sus dedos enterrados en mi pelo y cada vez iba más y más rápido, no había tregua, apreté un poco mis labios y ese fue el detonante. Enterró su pene un poco mas dentro y sentí como el líquido se deslizaba por mi garganta, hice un sonido de apreciación, algo como "mmm" y ahí el apretó más su agarre en mi cabeza (como si fuese eso posible) mientras mi miraba iba a la suya.
Quería tenerlo entre mis piernas YAAA!!
Continuará...
jueves, 23 de marzo de 2017
... Parte I
Era una noche fría, estaba abrigada y acurrucaita en mi pequeña cama. No era tan tarde como se veía pero no encontraba nada que hacer y decidí dormirme y así acabar con otro día mas de pura monotonía. Cuando ya había apagado las luces e iba a tratar de conciliar el sueño un mensaje llegó a mi celular tonteando lo agarro y veo que es de la persona que me tiene despertando todas las madrugadas con mis muslos húmedos y pegadizos. Me estaba invitando a pasar la noche abrigada junto a él. Acepté de inmediato, quería calentarme en todos los sentidos.
Dispuse a cambiarme, elegí unas braguitas color piel, no queria dejar nada a la imaginación, era que me viera y sin temor la rompiera encima de ser necesario, decidí no ponerme brasier y por encima me puse un vestido negro, que me daba un poco mas abajo de la rodilla, con unas converses negra y un pequeño abrigo para cuando saliera a la calle no morir congelada.
Cuando iba de camino a su casa mi mente viajaba en todas las cosas que quería que me hiciera y que yo quería hacerle. Quería que fuera como en todos los sueños que tenia con él, tenia que ser así.
Llegué finalmente luego de 15 minutos manejando. Toqué el timbre e inmediatamente abrió la puerta. Tenia un aspecto un poco somnoliento, camisa blanca con los tres primero botones abiertos, pantalón de tela con botón superior abierto, cabello despeinado y en las manos tenia una botella de algún vino que no conozco. ¡que ri-cu-ra de hombre!
Me invitó a pasar, acepté. Me dijo que me pusiera cómoda pero sentía que la lengua me la había comido los ratones porque todo lo que hacia era asentir con la cabeza. Me senté en un sillón negro que tenia y éste me pasó una copa llena de un líquido color uva, inmediatamente lo tomé, estaba nerviosa y tenia que relajarme si quería disfrutar el momento. Se sentó a mi lado y puso su mano en mi muslo descubierto, su toque era suave y estaba haciendo circulitos, eso hizo que algo se deslizara en mis bragas y que apretara mis muslos de manera deliciosa. Lentamente se acercó mas a mi, con su mano libre tocó mi mejilla y me dio un beso breve. Sentí morir en ese momento. Me quitó la copa de las manos y volvió a besarme, esta vez no fue breve, comenzó primero rozando nuestros labios, luego su lengua hizo espacio y se adentró dentro de mi boca, explorándola por completo, decidí hacer lo mismo y mi lengua se puso a jugar con la suya, se despegó un poquito y aproveché y agarré su labio inferior y lo chupé y tiré de él suavemente hacia mi. A mi galán al parecer le gustó lo que hice porque medio gruñó y me levantó del sillón y me puso encima de él, volvió su boca a la mía pero el beso no era suave, era salvaje, lleno de excitación, muy intenso. Sus manos viajaban por mis muslos y subieron hasta donde estaba mi abrigo y lo sacó de mi, todo eso sin dejar de besarme. Yo ni tonta ni perezosa comencé a quitar los botones restantes de su camisa y toqué su torso que estaba duro y que se contraía con mi toque. Sin darme cuenta estaba debajo de él en el sillón, eramos todo besos, todo manos, todo deseo. Sentí su pene punzando por encima de su pantalón entre mis piernas. Dios! No sabia cuanto mas podría durar sin tener este hombre dentro de mi.
Luego de muchos besos me paró y me pidió que fueramos a su habitación. Ya dentro se sentó en una esquina de la cama y me pidió que me quitara el vestido. Lo hice sin pensarlo.
Bajé mi vestido y lo saqué, primero un pie luego el otro. Todo eso sin quitar mi mirada de él, lo veía observándome, solo tenía unas braguitas color piel que me quedaba de maravilla. Se paró y se acercó lentamente a mi. Toco uno de mis pezones y estos se pusieron duros al instante, me acercó mas a él y llevó sus manos a mis nalgas, apretó un cachete y luego lo azotó, sentí nuevamente como algo se deslizaba en mis bragas. Me besó y me acostó en su cama. Puso mis manos por encima de mi cabeza y besó mi cuello, fue bajando hasta mis senos, comenzó besando al izquierdo mientras masajeaba el derecho, lo chupaba, lo lamia, le pasaba la lengua tan deliciosamente que mis manos fueron a su cabeza para indicarle que no parara. Cuando vio que tenía el pezón duro como una roca pasó al derecho y lentamente su mano fue bajando por mi estómago, mi ombligo, mi vientre, mi parte delicada. Hizo lo mismo con mi otro pezón y cuando vio que estaban ambos duros comenzó a besar mi estómago, mi ombligo y como pensé que iba a seguir la secuencia de que tocara mi parte húmeda estaba preparada para que su boca se pusiera ahi, pero me sorprendió, pasó su boca a mi muslo, luego al otro, lentamente me quitó las bragas, se posicionó bien y sin esperarmelo puso su boca ahí, en mi parte sensible. Salió un grito ahogado de mi e intente cerrar las piernas por la impresión pero él me detuvo y ya de nuevo tenía su lengua en mi clítoris. Primero pasó su lengua por el comienzo de éste hasta el final, luego mordisqueó un poquitin la parte de arriba y cuando me arqué del placer comenzó a usar su lengua de forma rápida y precisa por los lugares más sensible de este. No podía mas, mis piernas estaban flaqueando, cuando pensé que se iba a detener metió un dedo dentro de mi. Ahí si grité y mojé más, no se que tanto una persona puede mojar pero yo mojaba y mojaba con cada cosa que me hacia. Su dedo comenzó una tortura dentro de mi, dentro, fuera, dentro , fuera. Agregó otro de sus amiguitos dentro de mi y quise explotar en sensaciones, agarré su cabeza para que siguiera y volvió a meterse dentro de mi vagina con dos de sus dedos dentro de mi. Era tan rico, movía mis caderas al compás de sus dedos, mi respiración no era regular, sabia que en cualquier momento iba a estallar como una bomba nuclear, él seguía de manera rápida con sus dedos con su otra mano abría los pliegues de mi vagina y su lengua iba de arriba hacia abajo, de lado al otro lado, de forma circular, cada vez mas algo se apretaba en mi, me iba a venir, estaba a punto, sopló un poquito y ahí exploté en 20000 pedazos. Era toda sensaciones, mis piernas temblaban y cuando me tranquilice un poco abrí mis ojos y vi como se bebía mi líquido como si fuera el mas rico néctar.
Ahora venia lo bueno...
Continuará...